lunes, 26 de diciembre de 2011
¿Nunca has tenido esa sensación de tocar el cielo con tus propias manos? ¿La de estar lo suficientemente segura para comerte el mundo, con o sin ganas? La de correr dejando caer atrás la de metas ya alcanzadas, la de sueños ya conseguidos y la de deseos ya cumplidos. La misma sensación de sonreír por no encontrar motivos, o la de llorar por la misma cuestión anterior. Cuando presientes que está al caer una nueva etapa, que se aproxima lo bueno y que ahora lo que toca es ser feliz. Pues yo también me he sentido así, capaz de demostrarle al mundo que si quieres... puedes. Que sin metas, no hay propósitos. Que sin propósitos, no hay ilusiones. Y que sin ilusiones, no existen razones por las que llegar a la meta.
No hay un manual para saber que es lo realmente bueno.
En tres tiempos se divide la vida: en presente, pasado y futuro.
- El presente, es brevísimo.
- El futuro, dudoso.
- El pasado, cierto.
- El presente, es brevísimo.
- El futuro, dudoso.
- El pasado, cierto.
martes, 6 de diciembre de 2011
miércoles, 30 de noviembre de 2011
"A 200 por hora, a toda hostia. Porque no quiero enterarme de lo que pasa a mi alrededor. Pero de repente, aparece alguien, que te dice que aflojes, y cuando aflojas, te das cuenta de las cosas. De repente ocurre, algo se acciona y en ese momento sabes que las cosas van a cambiar. Pero todo termina y los caminos se bifurcan, cada uno toma una dirección pensando que al final los caminos se volverán a unir. Desde tu camino, ves a la otra persona cada vez más pequeña. "No pasa nada, estamos hechos el uno para el otro" piensas. Y al final, solo ocurre una cosa.. llega el puto invierno. No hay vuelta atrás, lo sientes, y es justo ahí, cuando entonces intentas recordar en que momento comenzó todo, y descubres que todo empezó antes de lo que pensabas. Mucho antes. Y es ahí, justo en ese momento, cuando te das cuenta de que las cosas solo ocurren una vez y de que por mucho que te esfuerces ya no volverás a sentir lo mismo. Ya nunca más tendrás la sensación de estar a tres metros sobre el cielo..." ♥
martes, 29 de noviembre de 2011
Me quitaste la vida; me robaste todo el aire.
Hablamos porque nos encanta el poder de decir cualquier cosa sin ningún tipo de consecuencia. Adoramos gritar a los cuatro vientos nuestros principios para venderles después a cambio de otros nuevos. Palabras que teñimos de rabia en un momento concreto, pero tan carentes de valentía... Palabras que suenan fuerte, pero tan débiles que confiamos en un leve soplo de brisa para que se las lleve lejos. Porque no nos gustan, pero nos gusta menos dejarnoslas dentro. Palabras que se adelantan al pensamiento, pero pronto vuelven a él para rondarle y rondarle...Palabras vacías, porque no son nada sin un lugar o un momento, sin alguien que las diga o alguien que las oiga, sin un sentimiento o un tono concreto. En ti está saber si son solo eso, palabras o el peor de los castigos.
Quizás.
Nadie es perfecto, es el éxito de la vida.
El exito en la vida consiste en ir siempre hacia delante, sin mirar en ningún momento hacia atrás. 'No existen problemas, sólo son pruebas que hay que superar.' Estamos diseñados para fallar, para caer y levantarnos de nuevo, para experimentar, sufrir y volver a empezar. Pero, sobre todo, estamos diseñados para seguir intentándolo, para no rendirnos nunca y para aguantar. Lo de tomar decisiones sólo está en nuestras manos.
domingo, 27 de noviembre de 2011
La Real Academia define la palabra imposible como algo que no tiene facultad ni medios para llegar a ser o suceder y define improbable como algo inverosímil que no se funda en una razón prudente. Que David ganó a Goliat era improbable, pero sucedió. El amor , las relaciones, los sentimientos no se fundan en una razón prudente, por eso no me gusta hablar de amores imposibles sino de amores improbables. Porque lo improbable es por definición probable. Lo que es casi seguro que no pase, es que puede pasar. Y mientras haya una posibilidad, media posibilidad entre mil millones de que pase... Vale la pena intentarlo.
sábado, 12 de noviembre de 2011
Hay cosas que no podemos explicar con simples palabras. Cosas como seguir vivos, o sentimientos como el amor y el compromiso. Sensaciones como volver a abrazar a un amigo. Quizás por eso, nuestra vida se compone de imágenes; momentos congelados en el tiempo para siempre de decisiones qué cambian el rumbo de las cosas; de fotografías fijas guardadas en la memoria que nos recuerdan cada segundo lo hermoso que es vivir. Y, es que, no debes perder ni un solo segundo de tu vida. Aprovecha, vive, siente...
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