Quizás.

Quizás no sea la más fuerte, la más valiente o la más decidida. Quizás me equivoque muchas veces. Quizás me de cuenta de lo que quiero cuando ya no lo tengo. Quizás mi lista de caprichos sea larguísima y mis paranoias aumenten todos los días. Quizás los malos momentos sean muchos, pero los buenos los superan. Quizás complique lo fácil, y quizás tropiece cien mil veces en la misma piedra, pero sé que siempre me voy a levantar.